lunes, 6 de enero de 2025

10 años del florecimiento de los Guayacanes

Ya casi se cumplen 10 años del viaje de 3 días en bicicleta desde Cuenca hasta Mangahurco por el florecimiento de los Guayacanes

https://barrosjuan.blogspot.com/2015/03/viaje-los-guayacanes-en-bici-desde.html

Algunas vías están en mejor estado que en el año 2017, antes la vía lastrada comenzaba en Cerro verde (40km a Mangahurco), ver:

https://barrosjuan.blogspot.com/2017/01/florecimiento-de-los-guayacanes-2017.html

Al día de hoy, el segmento malo va desde Paletillas hasta Mangahurco  (30km aprox.).


Después de varias visitas hemos decidido "proponer" la guía de visita de varios días desde Cuenca.

DÍA 1: ida

Salir temprano para los 351 km en la ruta: Cuenca - Pasaje - Buena Vista - Santa Rosa - Arenillas - Puyango (Opcional: visita  de 2horas al bosque petrificado y su museo)  4h (250km) hasta aquí.

Continuar por la troncal de la sierra pasando Alamor, hasta Pindal y tomar desvío hacia Milagros - Paletillas -  Bolaspamba -  Mangahurco. 

Opcional:

En le segmento entre "Cerro Verde" y la entrada a "el Pindo" a 18km de la salida de "Pindal", vía "Añacal" , se llega a "Pueblo Nuevo" para parquear y continuar con el sendero de 850m por la "quebrada del Caucho" hacia la "cascada del Lobo"


DÍA 2

Paseo por el campamento para tomar fotos

Desayuno en el centro de la ciudad

Visita a los Baños del Inca

Visita al mirador antes de Cazaderos

Visita a Cazaderos (almuerzo)

Visita a la poza de los lagartos desde "San Francisco de los Linderos" , al norte de Cazaderos vía el Limo.

retorno al campamento

Opcional: hacer bicicleta desde Bolaspamba hasta Mangahurco temprano en la mañana.

Opcional: Visitar Cerro Negro. Al norte del pueblo (sector Mangahurquillo, la Bocana) tomar sendero disponible en OSM.org hacia Cerro Negro (subida pronunciada, ideal para la bicicleta) con más de 7km.

DÍA 3: vuelta

Desayuno en el centro de la ciudad

Visita al museo de la municipalidad en la plaza central

Regreso a Cuenca

DÍA EXTRA:

1. Si se cuenta con un día extra, nuestra sugerencia es probar recorrer los 80km en bicicleta hasta la costa del Perú saliendo de "Capitan Hoyle" , TU-108 , Charanal TU-105, Tamarindo TU-107 pueblo Nuevo, Pampa del Trigal , Trigal, y llegando a Bocapan en la playa al sur de Zorritos. Si va en coche podría ser un problema que no se ha registrado el ingreso por una frontera oficial.  Distancia: 71 km. Hora: 4:40. Ascender: 1392 m. Descender: 1617 m.

2. También se puede recorrer más la zona y sus diversas tierras productivas. Existe un nuevo balneareo listo para visitar.

Nota Final

1. Existen programas de 1 día. Uno duerme las 6 a 8h en un bus y llega en la mañana a Mangahurco para realizar las actividades del día 2. sy se vulve a dormir en bus de regreso a Cuenca. 

2. Los mapas presentados en osm.org son de gran utilidad y son usados en aplicaciones como OSMand y maps.me, recuerde siempre bajar la ultima versión de los datos fuera de línea ya que la conexión de datos no es muy buena en la zona (todavía.)

Mi delirio sobre el Chimborazo. 1822

 “Mi delirio sobre el Chimborazo” Simón Bolívar (1822)

Yo venía envuelto en el manto de Iris,
desde donde paga su tributo el caudaloso Orinoco
al Dios de las aguas.
Había visitado las encantadas fuentes amazónicas,
y quise subir al atalaya del Universo.
Busqué las huellas de La Condamine y de Humboldt;
seguílas audaz, nada me detuvo;
llegué a la región glacial,
el éter sofocaba mi aliento.
Ninguna planta humana había hollado la corona diamantina
que pusieron las manos de la Eternidad
sobre las sienes excelsas del dominador de los Andes.
Yo me dije: este manto de Iris que me ha servido de estandarte,
ha recorrido en mis manos sobre regiones infernales,
ha surcado los ríos y los mares,
ha subido sobre los hombros gigantescos de los Andes;
la tierra se ha allanado a los pies de Colombia,
y el tiempo no ha podido detener la marcha de la libertad.
Belona ha sido humillada por el resplandor de Iris,
¿y no podré yo trepar sobre los cabellos canosos del gigante de la tierra?
¡Sí podré! Y arrebatado por la violencia de un espíritu desconocido para mí,
que me parecía divino, dejé atrás las huellas de Humboldt,
empañando los cristales eternos que circuyen el Chimborazo.
Llego como impulsado por el genio que me animaba,
y desfallezco al tocar con mi cabeza la copa del firmamento:
tenía a mis pies los umbrales del abismo.

Un delirio febril embarga mi mente;
me siento como encendido por un fuego extraño y superior.
Era el Dios de Colombia que me poseía.

De repente se me presenta el Tiempo
bajo el semblante venerable de un viejo cargado
con los despojos de las edades:
ceñudo, inclinado, calvo, rizada la tez, una hoz en la mano…

«Yo soy el padre de los siglos,
soy el arcano de la fama y del secreto,
mi madre fue la Eternidad;
los límites de mi imperio los señala el Infinito;
no hay sepulcro para mí, porque soy más poderoso que la Muerte;
miro lo pasado, miro lo futuro, y por mis manos pasa lo presente.

¿Por qué te envaneces, niño o viejo, hombre o héroe?
¿Crees que es algo tu Universo?
¿Qué levantaros sobre un átomo de la creación es elevaros?
¿Pensáis que los instantes que llamáis siglos pueden servir de medida a mis arcanos?
¿Imagináis que habéis visto la Santa Verdad?
¿Suponéis locamente que vuestras acciones tienen algún precio a mis ojos?
Todo es menos que un punto a la presencia del Infinito que es mi hermano.»

Sobrecogido de un terror sagrado,
«¿cómo, ¡oh Tiempo!—respondí—
no ha de desvanecerse el mísero mortal que ha subido tan alto?
He pasado a todos los hombres en fortuna,
porque me he elevado sobre la cabeza de todos.
Yo domino la tierra con mis plantas;
llego al Eterno con mis manos;
siento las prisiones infernales bullir bajo mis pasos;
estoy mirando junto a mí rutilantes astros, los soles infinitos;
mido sin asombro el espacio que encierra la materia,
y en tu rostro leo la Historia de lo pasado y los pensamientos del Destino.»

«Observa—me dijo—,
aprende, conserva en tu mente lo que has visto,
dibuja a los ojos de tus semejantes el cuadro del Universo físico,
del Universo moral;
no escondas los secretos que el cielo te ha revelado: di la verdad a los hombres.»

El fantasma desapareció.

Absorto, yerto, por decirlo así,
quedé exánime largo tiempo,
tendido sobre aquel inmenso diamante que me servía de lecho.
En fin, la tremenda voz de Colombia me grita;
resucito, me incorporo,
abro con mi propias manos los pesados párpados:
vuelvo a ser hombre, y escribo mi delirio.



Originalmente encontrado en : http://xochitl.net/hum2461/lecturenotes/19centuryfile/documents/Chimborazo.pdf

duplicado por si lo borran. Lo descubrí viendo cine documental.